Preguntas antes del “sí, acepto”

Preguntas antes del “sí, acepto”


Mujeres y hombres nos lanzamos al matrimonio sin cuestionarnos cosas por las cuales uno de cada tres matrimonios se divorcian

Un estudio del New York Times, realizado por psicólogos y terapeutas de pareja, considera que en la actualidad no nos preguntamos una serie de cuestiones básicas antes de casarnos, haciéndolo de un modo irresponsable e inmaduro. Por eso, novias y novios del mundo, no den este gran paso sin estar completamente seguros de conocer las respuestas a las siguientes preguntas y que todas ellas sean positivas:

1. ¿Los dos queremos tener hijos?

En caso afirmativo, deben estar de acuerdo en quién va a dedicarle mayor tiempo a su educación. Esto es fundamental porque en la actualidad mujeres y hombres estamos en igualdad de condiciones laborales y las mujeres necesitamos también desarrollarnos profesionalmente para ser útiles a la sociedad.

2. ¿Conocemos nuestros historiales clínicos por completo?

Deben saber de sus respectivas enfermedades tanto físicas como mentales, sin ocultar ningún antecedente. Hablen también de las enfermedades de los miembros de su familia, sobre todo cuando se trata de retraso mental, diabetes, padecimientos cardiacos y enfermedades genéticas.

3. ¿Tendríamos un bebé con defectos congénitos?

Si durante el embarazo les informara el médico que su hijo va a nacer con un problema de síndrome de down, parálisis cerebral o alguna malformación, ¿continuarían o interrumpirían el embarazo? Ésta es una cuestión de vida o muerte que los unirá o separará.

4. ¿Tenemos claras nuestras obligaciones como esposos?

No compartir la misma opinión respecto al ahorro es un detalle fundamental que causa que miles de parejas rompan. Un hombre demasiado avaro o una mujer despilfarradora, o viceversa, son incapaces de mantener una economía familiar equilibrada y pueden acabar destruyendo la relación.

5. ¿Conocemos las creencias y necesidades espirituales del otro?

Es indispensable estar de acuerdo sobre cual será la educación religiosa que le darán a sus hijos, porque esto también afectará el colegio al que elijan que vayan sus hijos y los amigos que les gusten para ellos.

6. ¿Qué clase de hogar espera formar cada uno?

Es muy importante aclarar de quién será la responsabilidad a la hora de organizar las tareas de la casa y el rol que cada miembro de la pareja va a desempeñar dentro de las funciones del hogar, porque si no se hacen equitativamente, con el tiempo esto puede traer severos resentimientos y conflictos entre ustedes.

7. ¿Es mi pareja tan cariñosa y amable como yo espero?

Pregúntense si les llena emocionalmente el otro tanto como cada uno lo necesita, ya que la falta de demostración de afecto es también otro de los principales motivos de separación entre los esposos.

8. ¿Realmente nos escuchamos mutuamente?

En muchos casos no se toman en cuenta las necesidades ni las preocupaciones del otro y acabamos casándonos con desconocidos que no tienen nada que ver con nuestra forma de ser ni de sentir, simplemente por la costumbre de estar a su lado o por el miedo a quedarnos solos.

9. ¿Nos sentimos cómodos sexualmente?

Una parte esencial en la relación de pareja es la sexualidad y es fundamental llevarla a cabo tal y como les gusta a los dos. Por eso es importante que confíen plenamente en el otro para hablar abiertamente sobre sus fantasías, gustos, necesidades y tabúes sexuales.

10. ¿Confiamos ciegamente el uno en el otro?

Si no están completamente seguros de que su relación es lo suficientemente sólida como para superar cualquier obstáculo que pueda surgir en un futuro, corren un gran riesgo de separarse con el tiempo.

11. ¿Respetamos y valoramos a la familia del otro?

Cuando no tienen claro hasta qué punto sus respectivos padres podrán interferir en la relación de pareja, muchas veces existe la pesadilla de la suegra venenosa que destruye una bonita relación de amor, metiendo discordia por asuntos de poca importancia.

12. ¿Nos gustan y estamos dispuestos a convivir con los amigos del otro?
Aunque a primera vista pueda parecer algo insignificante, una de las claves de las parejas exitosas es llevarse bien con el círculo más cercano de la otra persona, de lo contrario pueden tener peleas por terceras personas.

13. ¿Existe algo a lo que no estamos dispuestos a renunciar al casarnos?

¿Sacrificarías tu carrera profesional por convertirte en madre y esposa si él te lo pide, o te alejarías de tu familia para irte con él a otro país? ¿Abandonaría él a sus amigos si a ti te parecieran una mala compañía, o cambiaría de empleo por pasar mayor tiempo contigo y sus hijos, o renunciaría a las fiestas y antros para pasar un sábado juntos y tranquilos en casa?





POR: LICDA. NORMA PEREZ

CUIDADO CON LOS AMORES CIBERNETICOS

¡Cuidado con los amores cibernéticos!



Definitivamente vivimos en una era en la que la tecnología te deja con la boca abierta. Ahora con un simple clic, ya estás en contacto con miles de personas en todo el mundo, desde la comodidad de tu hogar u oficina.

Todo es mucho más sencillo, las consultas, investigaciones y dudas se resuelven en un santiamén, esto es realmente maravilloso, pero, también conlleva cierta dosis de peligro.

Me doy cuenta que los jóvenes y niños ya nacieron con el chip integrado, saben cómo usar la computadora con sólo sentarse frente a ella.


Navegar por internet es algo natural en ellos, como también lo es el conocer amigos de todo el mundo a través de los chats, nacieron prácticamente con ello. Sin embargo no todo es tan maravilloso como se ve.

Por supuesto es fascinante estar en contacto con otras culturas y expandir tus conocimientos a través de este avance tecnológico, lo malo viene cuando pierdes de vista que también puedes ser víctima de malas personas, que te cuentan mentiras y te envuelven en una terrible trampa que puede traerte serias consecuencias.

Créeme, no exagero cuando digo que puede ser sumamente peligroso que entregues tu confianza a alguien que sólo conoces a través de la red. Piensa un poco, si para muchas personas es sencillísimo mentirte viéndote a los ojos, ¿no lo será aun más a decenas de kilómetros de ti?

Hoy escucho con más frecuencia el término “romance cibernético” o que tienen una relación de noviazgo a través de internet y me pregunto ¿cómo?

Y que conste que no es que sea una retrograda o que no me adapte a los cambios y avances de la tecnología, al contrario no me cansaré de alabarlos, pero, definitivamente, para mí lo primordial en una relación amorosa es el contacto humano que pueda haber, es sentir y captar que lo que me diga mi novio sea verdad, y que no me invente una realidad que no existe.

Si te lo hacen en vivo y a todo color ¿qué no podrán hacer con un cómplice o encubridor como es el ciberespacio?

De verdad, no es ficción el hecho de que muchas chicas han sido secuestradas al conocer al susodicho amor cibernético. Esta situación tan peligrosa puede cambiar tu vida para siempre y en el peor de los sentidos.


No te digo que dejes de utilizar esta herramienta que ya es indispensable en nuestros días, pero, sí te propongo que tengas mucho cuidado en los datos que des.

Jamás reveles tu dirección, ni números de cuentas bancarias, ni nombres de tu familia o actividades de tus padres. Nada que pueda comprometer tu seguridad y la de tu familia.

No te arriesgues a ir donde te cite. Tú debes tener el control de la situación, si el acercamiento se da, tiene que ser en tu territorio, donde tú puedas y sepas moverte y defenderte, jamás acudas sola y por supuesto que sea en un lugar público donde puedas pedir ayuda, en caso que la necesites.

Aprende a convivir con los avances tecnológicos pero sin arriesgar tu integridad física, cuídate. Lo mejor definitivamente es enamorarte de quien sí puedes ver y constatar que es realmente sincero, porque generalmente el “ciber amor” es sólo una ilusión, bella, es cierto, pero que finalmente ¡no es real!.












POR: LICDA. NORMA A. PEREZ ACOSTA

EL REGALO PERFECTO PARA EL

El regalo perfecto para él





¿Tímido, apasionado, seductor, divertido o deportista? Dale al hombre que amas un regalo inolvidable y acorde con su personalidad


Te damos algunas propuestas para facilitarte atinarle a ese obsequio personal que quieres encontrar para él. Pero primero debes analizar un poco las cosas que le gusta hacer, para poder determinar qué regalo irá perfecto con su personalidad, pues como él no hay dos.


Tranquilo: Es algo apacible, tímido y reflexivo. Rara vez se emociona con actividades intensas o muy demandantes. Su mayor placer es estar descansando en casa y ver televisión. Su vestimenta, aunque no se ve anticuada, es sencilla y convencional.

El regalo perfecto: Una fresca y ligera colonia, unos pants, unas pijamas, un juego de mesa como backgammon, dominó o cartas, varios DVD’S de sus películas favoritas.

Aventurero: Es apasionado, idealista y comunicativo. Para él lo más importante es estar a gusto. Siempre usa la misma ropa, pues no le da mucha importancia. Le gustan las prendas un poco descuidadas, pero no le desagrada verse actual.

El regalo perfecto: Unos lentes de sol, una loción de fragancia cítrica, entradas para un concierto, unos pantalones de mezclilla y una camiseta, una mochila de cuero.

Clásico: Es muy hogareño, protector, trabajador y responsable. Le satisface mucho percibir el cariño y cumplir los caprichos de sus seres queridos. Es un hombre fuerte, masculino, seductor e incluso arrollador.

El regalo perfecto: Una loción de un aroma intenso, un saco informal que vaya bien con cualquier pantalón, un conjunto de pijama, bata y pantuflas, un estuche de herramientas eléctricas con taladro, sierra y lijadora.

Juguetón: Es expresivo, divertido y dulce. Cualquier regalo le agrada porque él es muy sencillo. Su estilo es un poco infantil pero muy en línea con lo que está de moda. No se opone a que le escojas qué atuendo usar.

El regalo perfecto: Un gorro o cualquier accesorio muy actual, una colonia de olor fresco, un mini estéreo, CD’s de juegos electrónicos o de su música favorita, DVD’s de las películas que le gustan.

Elegante: Es gentil, adulador y seductor. Cuida al máximo su imagen y siempre está acicalado y pulcro. Armoniza espléndidamente todas sus prendas, aún en situaciones informales.

El regalo perfecto: Un vale por un día en un spa, una fragancia de maderas y especias, una fina corbata, una camisa de vestir, una cartera de piel, un elegante juego de plumas, una agenda electrónica.

Atlético: Es deportista, activo y varonil. Disfruta mucho tener actividades al aire libre. Su aspecto es fresco y cómodo. Todas sus prendas son relajadas y simples. Respecto a los autos y a la ropa deportivos, está siempre al tanto de la última moda.

El regalo perfecto: Unos boletos para el partido que más disfruta, un agua de colonia de fragancia cítrica, una maleta para el gimnasio, un kit de productos aftershave humectantes y calmantes de la piel.















Por: Licda. Norma Perez

EL INCESTO


Culturalmente el incesto es la práctica de relaciones sexuales y/o el establecimiento de alguna relación de parentesco entre individuos ...

EL INCESTO (DEL LATIN INCESTUS) ES LA RELACION SEXUAL ENTRE PARIENTES ENTRE LOS QUE ESTA PROHIBIDO EL MATRIMONIO.

relaciones sexuales entre personas que son familiares por sangre (hermanos, padres, primos, etc.).

No obstante se encuentran algunas excepciones históricas a la prohibición universal del incesto: Tenemos los casos de las monarquías del Antiguo EgiptoCleopatra, quien gobernó en matrimonio primero con uno de sus hermanos y luego con otro; la de los monarcas del Tawantinsuyo y las de los antiguos monarcas hawaianos.
(véase, por ejemplo, la biografía de

En todos los casos primaba una razón de Estado que se podía resumir en el intento de mantener concentrado el poder en una familia (dinastía); por esto tales incestos solían ser a veces nominales y era frecuente la poliginia por parte de los varones de esas parejas de incesto legalizado; curiosamente, tales incestos concluían frecuentemente en guerras dinásticas fratricidas.

Sin embargo existen ciertas culturas y sociedades en las que las relaciones incestuosas son una práctica social común y aceptada. Este es el caso del Tíbet, donde está permitido el matrimonio entre individuos que tienen entre sí una relación de descendencia/ascendencia lineal.


En ese sentido podemos hablar de aquel individuo relacionado con otro a través de la relación de filiación (patrifiliación en el caso de la relación de un individuo varón o hembra con su padre biológico y matrifiliación en el caso de la relación entre un individuo varón o hembra con su madre biológica).

La gran mayoría de las legislaciones del mundo consideran (por alguna razón o tabú) el incesto como delito, aunque sea practicado con "mutuo consentimiento" entre mayores de edad. Las sanciones prescritas en este caso oscilan desde el castigo severo hasta el repudio social sin mayores conscuencias para el individuo.


Explicación biológico-genética

Uno de los principales motivos por los que el incesto ha sido prohibido en muchas culturas es que los seres humanos que nacen como fruto de una relación incestuosa corren un mayor riesgo de desarrollar problemas psíquicos relacionados con la tenencia de cargas genéticas paralelas. Ello plantea que el incesto reduce la necesaria variabilidad genética, que permite la diversidad de rasgos y supervivencia de la especie.

Además se ha observado que ciertas enfermedades y determinadas anomalías fisiológicas (como la espina bífida, por ejemplo) tienen una mayor incidencia entre individuos con relación de parentesco consanguíneo entre sí, tanto por vía lineal como por vía colateral.


Explicación psicológica



Sigmund Freud abordó el estudio del tabú del incesto a través de la teoría psicoanalítica. Partía de la idea de que existía una "horda primitiva" promiscua en la que la rivalidad entre machos por el acceso sexual a las hembras provocó el recurso a la violencia y el homicidio dentro del propio grupo de parentesco.

Parece ser que según Freud el incesto es un impulso básico de la psique humana. El enfrentamiento entre individuos que pertenecían al mismo grupo sociofamiliar dio lugar a una aversión al incesto no por el tipo de relación que constituye en sí, sino por la agresividad y las muertes ocasionadas dentro del propio grupo social.

Análisis posteriores concluyen que una gran parte de las culturas comparten un aborrecimiento psicológico hacia la práctica de relaciones sexuales o la tenencia de relaciones de parentesco adicionales entre individuos de la misma familia vinculados por otra relación de parentesco previa.

Explicación social



Otro de los aspectos destacados acerca del origen del tabú del incesto es el relacionado con la alteración de las relaciones sociales o de la armonía social intrafamiliar.

Por una parte el incesto traería consigo el retrotraimiento del grupo y el repliegue social sobre sí mismo.

Al reducirse las relaciones de parentesco al seno intrafamiliar como elemento de autoperpetuación se elimina la posibilidad de ampliar las redes sociales del grupo con otro grupos sociales.

Ello puede ser especialmente negativo dado que el establecimiento de una relación de alianza o de afinidad entre dos grupos sociales es la que se hace posible entre otras vías por medio del matrimonio.

Ello da lugar a una ampliación de las redes sociales en caso de necesidad económica, conflicto territorial o búsqueda de apoyo por diversos motivos.

Respecto a la armonía intrafamiliar se entiende que el incesto supone la confusión de los roles sociales e incluso la alteración de las relaciones jerárquicas dentro del grupo (por ejemplo, la ocupación del rol de padre y marido al mismo tiempo).


Explicación demográfica

Las primeras poblaciones humanas de cazadores recolectores se caracterizaban por tener unos elevados índices de mortalidad, tanto entre la población adulta como entre la infantil.

La precaria alimentación de esos grupos hacía que el período de lactancia de los neonatos y la dependencia respecto de la madre biológica fuera mucho mayor que en la situación actual.

Para cuando los hijos tenían madurez sexual, sus madres ya eran hembras viejas —la esperanza media de vida rondaba como mucho en torno a los 30 años— incapaces de engendrar más progenie. Debido a esto, los individuos jóvenes tenían que buscar fuera el acceso sexual a las mujeres.

La práctica de este hábito impuesto por la propia biología humana del momento impedía el incesto. Algunos autores clásicos como Morgan, McLennan o Bachofen hablan del hecho de un proceso de aprendizaje cultural por medio del cual el propio hábito de los individuos hizo que la práctica del incesto fuera dejada de lado.















POR: LICDA. NORMA PEREZ ACOSTA